Los comienzos de Sal Bueno se iniciaron de la mano de D. Mariano Bueno Ruíz en el año 1937 al establecerse de manera permanente en un almacén de la calle Pérez Galdós de Valencia, donde la sal y el pienso para animales constituían su principal actividad. Con anterioridad a esta fecha, su suegro D. José Oltra, contaba ya en 1922 entre su distribución de alimentos con la sal.
El Sr. Mariano Bueno acudía todos los días al puerto de Valencia, a la espera de las grandes barcazas que descargaban sal procedente de las salinas de San Pedro del Pinatar (Murcia), propiedad de la empresa Salinera Española. Tras cargarla en su carro, emprendía el reparto diario. La jornada laboral empezaba al despuntar el día y concluía al caer la noche, o como le gustaba decir al Sr. Bueno: “ hasta que no se vendía el carro de sal no se regresaba a casa”. Fruto de esta filosofía de trabajo, se produjo en 1957 el alquiler de un almacén más grande en la localidad de Mislata.
Precisamente sería allí donde comenzaría la actividad del empaquetado de la sal a mano. El negocio seguía creciendo, en 1962 se adquiere en propiedad un nuevo local en Mislata, instalando en él nueva maquinaria consistente en varios molinos para molturar y refinar varios tipos de sales. Además se compraron dos vehículos que agilizaban y ampliaban el reparto de la sal.
Nuevamente la expansión del negocio hizo necesario cambiar su ubicación. Aldaia sería la localidad elegida, al construir allí D.Mariano Bueno una gran nave de 1600 m2, nave que fue siendo ampliada en años venideros hasta alcanzar los 4300m2.
La llegada a Aldaia se produjo en 1975; ya en esa época D. Mariano Bueno contaba con la ayuda de su hijo Julián Bueno, cuya incorporación a la empresa familiar había acontecido años atrás. Durante la década de los ochenta nuevas inversiones hicieron posible la adquisición de la maquinaria más moderna y puntera existente en el mercado, siendo ejemplos de ello el empaquetado de sales yodadas y yodoflouradas en 1983, la compra de una máquina compactadora de pastillas de sal en 1985 o el incremento de la flota de vehículos hasta alcanzar la cifra de ocho camiones.
El cambio de razón social de Sal Mariano Bueno a la actual de Sal Bueno, S.L. tuvo lugar en 1989, al entrar en sociedad junto a D. Mariano Bueno su hijo D.ºJulián Bueno.
Tras más de sesenta años al frente de su negocio, D.º Mariano Bueno fallecía en septiembre de 2000. A su muerte dejaba tras de sí una empresa líder en su sector, moderna, ágil, perfectamente capacitada para enfrentarse a los nuevos retos que el siglo XXI anunciaba. Fueron estas características las que llamaron la atención de una gran multinacional, Salinera Española. Poseedora de las salinas de San Pedro del Pinatar y de las salinas de la isla de Ibiza, vio en Sal Bueno el aliado perfecto para expandir su actividad en la zona mediterránea.
De esta manera dos empresas que habían caminado juntas durante mucho tiempo pero en direcciones paralelas ( la familia Bueno-Oltra siempre adquirió su sal en estas salinas), decidieron en julio de 2001 mirar hacía un mismo horizonte, al absorber prácticamente en su totalidad Salinera Española a Sal Bueno, quedando, como no podía ser de otra manera, D. Julián Bueno como gerente de la misma.
Hoy en día Sal Bueno mantiene intacto el espíritu de humildad y sacrificio que esgrimieron sus creadores y trabajadores, buscando siempre un mismo objetivo, la satisfacción plena de nuestros clientes.